Los creyentes de la palabra de Dios debemos tener en cuenta este vocablo tanto de manera personal, de hecho, la misma Biblia se considera como un legado que el propio Jesús nos ha dejado para predicar su palabra. La preservación de las sagradas escrituras es vital pues impulsa a mantener los valores, la enseñanza para nuestro diario vivir e incluso el temor a Dios. Es importante dejar un buen legado para nuestra descendencia y solo podremos llegar a alcanzar una grata herencia si cumplimos con la palabra del Señor.
Predicar el evangelio fue y será siempre un privilegio para el hijo de Dios. “Ir por todo el mundo y hacer discípulos a todas y en todas las naciones”. Mateo.28:19
A continuación, una breve reseña del dr Charles Stanley:
El Dr. Charles Stanley, pastor, autor y predicador cristiano, ha partido a la presencia del Señor. Falleció en la mañana de ayer martes 18 de abril, a los 90 años. En 65 años de ministerio, el Dr. Stanley ayudó a difundir el evangelio de Jesucristo por todo el mundo a través de su ministerio de enseñanza de la Biblia.
El pastor Charles Stanley fue una figura influyente en la comunidad cristiana en los Estados Unidos. Nacido el 25 de septiembre de 1932 en Dry Fork, Virginia, Stanley ha pasado la mayor parte de su vida trabajando como pastor y líder espiritual. Stanley ha pasado por momentos difíciles en su vida personal y ha hablado abiertamente sobre los desafíos de su matrimonio y utilizado su experiencia para ayudar a otros en situaciones similares.
Además de su trabajo en la iglesia y en la Convención Bautista del Sur, Stanley también fue conocido por su trabajo como escritor y presentador de programas de televisión. Ha escrito más de 30 libros y fue presentador del programa «En Contacto» durante más de 40 años.
En resumen, Charles Stanley fue un líder espiritual respetado y una figura influyente en la comunidad cristiana. Su trabajo como pastor, escritor y presentador de programas de televisión ha llegado a millones de personas en todo el mundo.
Algunas frases muy conocidas de Charles Stanley que nos puede orientar a un pensamiento constructivo y edificador:
- Si hemos construido en los frágiles pilares de la sabiduría humana, el orgullo y el amor condicional, las cosas pueden lucir bien durante un tiempo, pero un cimiento débil provoca el colapso cuando vengan las tormentas.
- Cuando aprendemos de la experiencia, las cicatrices del pecado nos pueden conducir a la restauración y a una renovada intimidad con Dios.
- El tiempo que pases solo con Dios transformará tu carácter y aumentará tu devoción. Luego, tu integridad y comportamiento divino en un mundo incrédulo hará que los otros deseen conocer al Señor.