Los pensamientos hacen referencia a procesos mentales relativamente abstractos, voluntarios o involuntarios, mediante los cuales el individuo desarrolla sus ideas acerca del entorno, los demás o él mismo. Los pensamientos son ideas, recuerdos y creencias en movimiento que se interrelacionan.
Como diría Martín Lutero: «No puedo evitar que las aves vuelen sobre mi cabeza, pero soy capaz de evitar que hagan nido en ella».
No puedes evitar que un pensamiento negativo venga a tu mente en cualquier momento, pero puedes evitar que ese pensamiento haga nido en tu mente. ¿Qué podemos decir de esto?, que permitimos que los pensamientos nocivos se apoderen de nosotros.
Hay una buena noticia: en la presencia del Señor, nuestros pensamientos se transforman.
Cuando le conocemos a Dios, él nos da una nueva identidad y genera cambios importantes en nuestra vida, en nuestra conducta y en la manera en que vivimos. La batalla continua del ser humano es una batalla entre la verdad y la mentira. Muchas veces tenemos pensamientos negativos y damos paso a que el enemigo nos lance una mentira a la mente, lo que lleva a que se expresen en acciones.
Necesitamos entendimiento para identificar las acciones buenas y malas. Hay varias cosas que podemos quitar de nuestra vida, como los pensamientos negativos que nos causan tristeza, confusión y ansiedad. Los pensamientos negativos son ideas dañinas y pesimistas que, si no se desechan a tiempo, pueden llegar a destruir los ideales de una persona.
Tus pensamientos tienen el poder sobre tu vida y son capaces de crear o destruir, de dar solución o empeorar las cosas. Por eso es importante que protejas tu manera de pensar y ver las cosas.
Ahora la pregunta es: ¿Qué pensamientos tengo? ¿Pienso de manera positiva o negativa cuando tengo dificultades?
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si hay algo digno de alabanza, en esto pensad. Filipenses 4:8
Decidir los cambios con determinación, son la clave para renovar nuestros pensamientos.